sábado, 21 de noviembre de 2009

LA PESTE UNO DE LOS JINETES DEL APOCALIPSIS

La peste es una enfermedad que afecta tanto a animales como a humanos, esta causada por la bacteria Yersinia pestis. A lo largo de la historia la peste se ha convertido en una enfermedad paradigmática por su gran capacidad de diseminación. Aunque no esta claro se estima que a lo largo de la historia han muerto más de doscientos millones de personas a causa de esta enfermedad. Había dos tipos de peste la bubónica o negra por la que salían bultos en las extremidades: normalmente en las axilas, cuello, ingles,etc. La fiebre y el dolor de cabeza también eran sus síntomas. El otro tipo de peste era la pulmonar que se difundía sobre todo en invierno. La principal forma de trasmisión era a través de la pulga que habitaba en las ratas, se podía trasmitir por su picadura o por la mordedura de un animal infectado o por comer un animal infectado. También se podía transmitir por el aire. El contagio causó un gran terror y en algunos casos las casas de los infectados fueron tapiadas y quemadas para que no se produjeran más contagios.
La primera referencia que tenemos sobre la peste es del siglo IV, aunque se cree que anteriormente ya existía, a esta primera gran pandemia se la denomina peste de Justiniano fue descrita por el historiador bizantino Procopius. El brote se originó en Pelusium cerca del actual Canal del Suez desde donde se extendió hasta Alejandría y posteriormente hasta Constantinopla en 542 y duraría hasta el año 700 aproximadamente. Desde el siglo VIII al XIV Europa estuvo libre de grandes pandemias. Pero entre 1346 y 1353 se produjo otra gran epidemia que culminó en 1348 y que procedía sin duda de la península de Crimea que estaba ocupada por distintas tribus de mongoles, fueron los tártaros en concreto, que tenían relaciones con genoveses y venecianos. En 1340 los tártaros se aliaron con los venecianos y se enfrentaron con lo genoveses que tuvieron que refugiarse en la ciudad de Kaffa mientras el sitio de la ciudad se produce entre los tártaros un brote de peste y los muertos son catapultados al interior de la ciudad, cuando se levanta el sitio de la ciudad los genoveses ya estaban infectados y al regresar a Italia van extendiendo la enfermedad en los puertos en los que recalan. En Mesina en Sicilia se les impidió entrar pero algunas ratas se bajaron del barco y extendieron la enfermedad. Pronto se extenderá por el sur de Italia y más tarde al norte pasando a Francia y a la península Ibérica. Fue tan grande el número de muertos que el papa Clemente VI consagró el río Ródano para que se pudieran echar allí los cadáveres que no podían ser enterrados. En 1348 la peste atravesó el canal de la Mancha y llega a Inglaterra, un año después llegó a Noruega extendiéndose por toda Escandinavia, luego a Alemania y a Polonia y en 1351 llega a Rusia. Pero las consecuencias de la peste negra se mantuvieron hasta el siglo XV debido a otras epidemias y a su persistencia en la zona del mediterráneo uno de los episodios más tristes se produjo en 1466 en Constantinopla donde morían 600 personas al día y en 1478 en Venecia. En la península Ibérica tuvieron lugar grandes epidemias: en el Reino de Aragón destaca la peste que se produjo en la zona de Cataluña entre 1589-1592 y en la Corona de Castilla que se produjo entre 1598 y 1602 se extendió desde Santarder hasta Andalucía. Otra epidemia se produjo de 1647 a 1652 afectó a la zona de Aragón, Murcia y Andalucía y la de 1676 a 1685 que paró durante un tiempo pero volvió a reproducirse debido a los malos años agrícolas. En el siglo XVII aunque causó muchos estragos como es el caso de Londres en 1665 o Lyon en 1628 la peste fue reduciendo su virulencia en la zona europea. Aunque seguía existiendo todavía una gran impotencia por parte de la medicina si se habían producido algunos avances, en 1737 se produjo la última epidemia de peste en Europa que fue en Rusia. Después de estas fechas la peste tuvo tendencia a concentrarse en la zona de Siria, Egipto y Arabia. En el siglo XIX el mediterráneo oriental y meridional seguía vulnerable, pero tuvo tendencia a concentrarse en Asía donde se produjo la tercera gran pandemia en 1855 que se originó en China afectando también a la India.
La peste en Europa durante toda su duración tuvo grades repercusiones sociales que van a ocasionar la desaparición del feudalismo a largo plazo, también va influir en la literatura como es el caso de Boccacio que escribe su obra Decameron donde cuenta, una serie de historias por boca de unos jóvenes y unas doncellas que están reunidos y cuentan historias para pasar el tiempo mientras se refugian de la peste, en la literatura española también encontramos estas influencias en la obra de Jorge Manrique en concreto en Las coplas a la muerte de mi padre, donde aparece el tema de la muerte con un poder igualador entre clases y edades, fruto de la extensión de las epidemias. También influirá en el arte con el surgimiento de las representaciones de la llamada danza de la muerte en la que aparecen personajes de todas las condiciones y edades que son llevados danzando por la muerte, estas representaciones surgen en la Edad Media y se van a representar en las iglesias, en códices,...Esta gran pandemia también va influir en la religión pues en aquella época de predominio omnipotente de la religión sobre la sociedad las personas se acogían a determinados santos o advocaciones para intentar protegerse de la peste. Los santos protectores de la peste por excelencia van a ser San Roque y San Sebastián. En la actualidad en muchos pueblos y ciudades se conservan ermitas, capillas o altares dedicados a estos santos que protegieron a esa localidad de la peste. Un ejemplo de ello lo encontramos en Santa Cruz de la Zarza que es mi pueblo natal, a las afueras del pueblo encontramos varias ermitas que parecen proteger los caminos y entradas principales al pueblo, algunas ya han desaparecido pero otras aún perviven y tienen su origen en estos “votos” o promesas de la villa a los santos o a la Virgen María. Una de las que no se conservan y que se encontraba cercana a la Cañada Real Soriana (una de las principales vías de comunicación de la época) y a una de las puertas del pueblo, era la ermita de San Roque que en la actualidad ha desaparecido y sólo queda como prueba una pequeña talla del santo en una ermita cercana y el nombre del paraje donde se encontraba la ermita. Otra de estas ermitas “protectoras” es la de los Remedios que se encuentra también junto a uno de los caminos principales de acceso al pueblo y tiene su origen en época visigoda, según la leyenda la Virgen María se apareció en la fuente del pueblo y bendijo sus aguas para que todo el mundo que bebiera de ellas se curará de una enfermedad llamada “mal del fuego” y que según los síntomas que cuenta la leyenda se parecía mucho a la peste negra. La otra ermita que creo que podía corresponder a una de estas promesas era la de San Sebastián que no esta claro si en la actualidad esta derruida o dedicada a San Antonio. El caso es que esta ermita se encontraría en el actual emplazamiento de la ermita de san Antonio o en sus cercanías pero el caso es que se encuentra junto al camino de Ocaña o camino del Villar. Que une Santa Cruz de la Zarza con la villa de Ocaña y en aquellos años debía ser muy transitado por lo que era una de las principales vías por donde entraban las enfermedades, la ermita de San Sebastián debió tener cierta importancia e incluso se impuso este santo como patrón de Santa Cruz pero debió de ser durante un corto tiempo, después el santo y su ermita fueron olvidados. También se tienen datos sobre lo que se hacía con los viajeros antes de llegar al pueblo, como el recinto del pueblo estaba amurallado cuando había una epidemia las puertas se cerraban sin dejar ni entrar ni salir a ninguna persona y los viajeros que llegaban eran llevados a una aldea llamada Villar del Sauco, que pertenecía al término de Santa Cruz y que se encontraba despoblada allí debían pasar la cuarentena. En la actualidad de esa aldea sólo queda su iglesia pero quedan referencias en los archivos municipales sobre este proceso.
La palabra peste no sólo ha sido utilizada para designar a esta enfermedad sino a otras enfermedades epidémicas que provocaban el pánico colectivo y una fuerte mortalidad. Con esta palabra vienen designadas en el archivo municipal de Santa Cruz de la Zarza, una serie de epidemias que se produjeron el siglo XIX y que en realidad correspondían a una epidemia del cólera morbo. En estas informaciones viene registrada la lista de muertos y de cada uno pone su nombre, apellidos, edad, domicilio, lugar del fallecimiento, trabajo, etc. Además dice lo que debía hacerse en caso de que en una casa hubiera algún infectado se debía sacar una silla a la puerta en señal de que allí había un enfermo. Las familias más pudientes o que al menos contaban con un trozo de tierra, solían huir al campo a los llamados “montes” que eran verdaderas mansiones en el campo que tenían grandes comodidades y contaban con alojamiento para la familia y sus criados, además solían tener buen aprovisionamiento de alimentos debido a que estaban rodeados de ganados y campos de cultivo que eran de su propiedad.
La peste comenzó a remitir teniendo como causa principal de la mejora de la higiene y también por el avance de la medicina racional.

Bibliografía utilizada:
  • La enciclopedia Larousse 2000.
  • Archivo Municipal de Santa Cruz de la Zarza.
  • Algunos folletos publicados por: "Amigos del Museo Etnológico de Santa Cruz de la Zarza" y de la Biblioteca de Joaquín Arias de Santa Cruz de la Zarza.

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